sábado, 14 de junio de 2008

Entre pelotas y hombres

Qué dificil es aceptar después de dormir que lo ocurrido no fue un sueño. En esta fecha de torneos y mucho fútbol, los hinchas vuelven a soñar despiertos.

A pesar de las maravillosas lecciones que el equipo Holandés brinda al fútbol mundial, los peruanos seguimos esperanzados en alcanzar un cupo para el mundial de Sudáfrica.

Con un equipo que a veces posee muchas ganas (sólo cuando está herido y con obligación de ganar) debemos reconocer que no tenemos jugadores que sean la alternativa para cumplir funciones contra mounstruos del balónpie, da mucha pena ser representados de esta manera.

Particularmente creo y noto que el técnico, José Guillermo del Solar, puede conocer mucho de teoría (técnicas y tácticas) pero el motor de su eficacia no sólo depende de él. Simplemenete el Perú no tiene quienes puedan dar lucha internacionalmente y nuevamente caemos en una dependencia de nuestros "mejores candidatos" quienes creen que pueden hacer lo que quieren porque son los únicos que poseen la experiencia necesaria para este tipo de eventos.

En el gramado pareciera que ellos no juegan o crean excusas para no jugar y de esa manera ser desconvocados, no llamados o expulsados de la bicolor nacional. Qué consiguen con ello..pues gozar de sus vacaciones y cuidarse de posibles lesiones. No quisiera pensar que lo sucedido en el ya conocidisímo "Hotel Los Incas" haya sido una estratégia con fines particulares.

¿Dónde queda el amor por el país?. No podemos reclamarles, ni exigirles a los jugadores que hoy juegan y no tienen el roce, ni experiencia que tienen los castigados.


Todo proceso comienza de cero. Venezuela lo hizo y valga la verdad ya le está dando frutos aunque haya tenido que esperado mucho para gozar de su selección de fútbol. Una victoria ante el pentacampeón mundial y el centenariazo último le dan el respeto del que años atrás gozábamos.


Triste reconocerlo pero actualmente somos un equipo chico y no sé hasta cuándo ésto tendrá fin. Ya son 26 años de vida y la emoción de ir a un mundial, no la conozco. Creo que esto no es cuestión de ganas sino de concentración y profesionalismo en el momento de la verdad.


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